Marcel Proust (París, 1871 - París, 1922)
Primogénito de una familia acomodada, su temprana vocación de escritor, sumada a su gusto por la vida social de la aristocracia parisina, le hicieron abandonar los estudios de Derecho para dedicarse a la escritura. Con apenas veinticinco años publicó su primer libro, Los placeres y los días, al que siguieron obras misceláneas, breves ficciones, artículos periodísticos y traducciones de las teorías estetizantes sobre el arte de las catedrales y de Venecia del inglés John Ruskin. De salud precaria desde su infancia, se convirtió, sobre todo desde 1903 y 1905, fecha de las muertes de sus padres, en un enfermo crónico, y pasó el resto de su vida recluido, consagrado exclusivamente a su obra maestra: A la busca del tiempo perdido (1913-1927), compuesta de siete tomos de claras resonancias autobiográficas. También dejó un epistolario inmenso de gran importancia para la comprensión de su pensamiento íntimo y de la evolución de su gran obra. Falleció el 18 de noviembre de 1922 por causa de una neumonía, a la edad de 51 años.